
Me
vas a permitir que hoy, en este blog que desde hace algo más de un año venimos
dedicando a las rehabilitaciones de
fachadas en el centro de Madrid, en lugar de hablar de los materiales tan
avanzados o las técnicas novedosa que utilizamos para las impermeabilizaciones,
echemos la vista atrás para recordar uno de los materiales que más se ha
empleado por todo el país para darles un aspecto renovado a las fachadas.
Hablamos de la pintura a la cal responsable de ese blanco tan característico de
muchas localidades del sur y el levante peninsular.
La pintura a la cal, de hecho, se sigue utilizando con excelentes resultados en
las rehabilitaciones de fachadas en el
centro de Madrid. Es posible que no seas capaz de distinguirla pues
actualmente, en lugar de con su color blanco tradicional, se mezcla con tintes
muy diversos para conseguir otros colores: azules, verdes ocres…
Son muchas las ventajas de este tipo de pintura al aplicarla sobre las fachadas:
Es un tipo de pintura que, por sí misma, añade un plus de impermeabilización a
la pared en la que se aplica y, al mismo tiempo, permite la transpiración hacia
el exterior de esa pared lo que ayuda a evitar la condensación de la humedad.
Otra de sus ventajas es su precio reducido especialmente si la comparamos con
pinturas acrílicas de gran capacidad impermeable. Aunque también es cierto que
la durabilidad de la pintura a la cal es sensiblemente menor que otras
pinturas.
Aún con todo, en tiempos como los actuales, con tantas dificultades económicas,
desde Reicom Madrid todavía seguimos
empleando pintura a la cal en algunas fachadas de la capital.